USO DE ADITIVOS EN DIETAS DE CONFINAMIENTO
Debido la necesidad de intensificar la producción, muchos ganaderos adoptan diferentes estrategias nutricionales, donde utilizase diferentes recursos para superar los efectos negativos de la época seca, tales como: suministro de heno, silos de auto consumo, pastoreo diferido, suplementos proteicos y confinamiento.
El confinamiento de bovinos es una actividad que demanda gran uso de insumos y preconiza ganancia de peso. De esta forma, exige un alto grado de control para que los resultados necesarios puedan ser alcanzados. Donde las principales bases de la alimentación de esta práctica son los alimentos voluminosos y los concentrados.
La fuente de voluminoso a ser utilizada es responsable por gran parte del éxito de un confinamiento por suministrar fibra físicamente efectiva a los animales, algo que es esencial para el equilibrio ruminal de un bovino y que garantiza la disminución de disturbios metabólicos.
Los alimentos concentrados son aquellos que presentan menos del 18% de fibra bruta en su composición, pero tiene buen contenido proteico y energético. Ellos constituyen de 50 a 80% de una dieta de confinamiento. Minerales, vitaminas y aditivos son añadidos a los alimentos concentrados, en proporciones suficientes para satisfacer las exigencias orgánicas de los bovinos.
Los aditivos son sustancias intencionalmente añadidas al alimento con el fin de conservar, intensificar o modificar sus propiedades, siempre que no perjudique su valor nutritivo. Hay una serie de compuestos con propiedades potenciales para ser utilizados como aditivos en la nutrición de rumiantes.
En dietas para bovinos confinados la utilización de aditivos alimenticios tiene como principal objetivo la mejora de la conversión alimenticia y de la ganancia de peso, aunque los beneficios secundarios pueden ocurrir como la mejora en la sanidad general del animal.
Los principales aditivos utilizados son la Monensina Sódica, Salinomicina, Lasalocida y Virginiamicina, que son de la clase de los ionóforos, y los microorganismos e levaduras, que son probióticos.
El mecanismo de acción de los ionóforos se resume en alterar el movimiento de iones a través de la membrana celular llevando las células gram positivas a la muerte. Las bacterias gram negativas presentan una vía extra de producción de energía en la propia membrana celular, lo que las diferencia de las gram-positivas. Las bacterias gram positivas son las afectadas por la presencia del ionóforo, ya que son menos eficientes en la generación de energía, de tal modo acaban reduciendo su población. Las bacterias gram negativas pasan a predominar en el rumen con el uso de ionóforos. En resumen, el ionóforo controla la población de bacterias gram positivas posibilitando un incremento en la población de bacterias gram negativas que son las productoras de energía para los rumiantes.
. Los estudios demuestran una mejora en la eficiencia del metabolismo de energía, alterando los tipos de ácidos grasos volátiles producidos en el rumen, disminuyendo la energía perdida durante la fermentación del alimento. El mejor desempeño animal es el resultado de una mayor retención de energía durante la fermentación ruminal. Los ionóforos también pueden reducir la incidencia de timpanismo, diarreas y acidosis (por medio de un aumento en el pH ruminal e inhibición de las bacterias productoras de ácido láctico). Son observados incrementos alrededor de 15% en ganancia de peso y hasta 5% de mejoría en conversión alimenticia.
Los probióticos utilizados para rumiantes son alternativas de sustitución para los aditivos químicos, porque son considerados suplementos alimenticios compuestos de microorganismos vivos con la capacidad de instalarse y proliferar en el tracto ruminal e intestinal del huésped, resultando en una mayor digestión y protección contra las disfunciones fisiológicas e incluso enfermedades.
Sin embargo, cada aditivo tiene una característica y una limitación en la alimentación. Además de la importancia del uso de aditivo en confinamiento es debemos resaltar que la mejoría en los resultados productivos también es observada en animales que reciben aditivos a pasto.